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Caster Semenya vuelve a la competición por la puerta grande entre las críticas de sus rivales

Enviado Flick el 24 Agosto 2010 en Deportes, Derechos, Discriminación, Noticias, África

Caster Semenya ha vuelto a la competición después de que la Asociación de Federaciones Internacionales de Atletismo (IAAF) haya puesto fin a la investigación sobre su supuesta intersexualidad y decidido que no hay razón que le impida participar en la competición como mujer. Algo que no parece haber gustado a sus competidoras.

El retorno de la sudafricana se ha producido además a lo grande. Después de un año fuera de competición y sometida a una humillante presión mediática, Semenya se hizo con la victoria en el encuentro atlético que tuvo lugar este fin de semana en el Olímpico de Berlín, el mismo estadio en el que se proclamó Campeona del Mundo de los 800 metros el pasado año. “No he pensado en lo que ocurrió. Me he concentrado en esta carrera y en el cronómetro”, declaraba después con humildad.

La vuelta de Semenya, una mujer cuyo organismo fabrica de forma natural altos niveles de testosterona que favorecen su privilegiado físico y cuyo caso ha puesto sobre la mesa la problemática que supone casar la diversidad de género existente en la vida real con la concepción binaria de las competiciones tradicionales. Si bien su caso se ha resuelto de forma favorable, permitiéndole participar en la competición femenina (independientemente del resultado de sus análisis físicos, cuyo detalle se desconoce, de lo que no cabe duda es de su identidad de género femenina) sus competidoras no se encuentran precisamente satisfechas.

“Para mí, es un hombre” sentenciaba la italiana Elisa Cusma Piccione, que terminó tercera la carrera. Algo más diplomática se mostraba la canadiense Diane Cummins, octava. “Aunque sea una mujer, está en el límite de lo que se considera normal en términos biológicos (…) Desde esa perspectiva, la mayoría de nosotras tenemos la sensación de estar corriendo contra un hombre”, manifestó. La británica Jemma Simpson, cuarta en la carrera, declaró a su vez que “obviamente, se trata de una cuestión de derechos humanos, pero deben ser tenidos en cuenta los derechos de todos, no sólo los de una persona”.

¿Mal perder, el de las competidoras de Semenya? Te invitamos a dejar tu opinión…

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Una droga para evitar tener una hija lesbiana

Una médico de Nueva York llamada María New ha estado aconsejando a las mujeres embarazadas tomar un esteroide llamado dexametasona para prevenir la homosexualidad y el «comportamiento masculino» en sus hijas.

New es una endocrinóloga que estudia, entre otras cosas, una condición llamada hiperplasia suprarrenal congénita (CAH). Es causada por la sobre exposición a las hormonas masculinas en el útero, y puede dar lugar a anomalías del desarrollo que a menudo significa, como la revista Time indica, «toda una vida tomando medicamentos y esteroides para compensar el defecto de las glándulas suprarrenales.» También puede causar que las niñas nazcan con genitales ambiguos. (Clítoris de gran tamaño que parecen penes, aunque también tienen aberturas de vagina y el vientre completamente normal.)

Trabajando con varios colaboradores, incluyendo el psicólogo de Colombia, Heino FL-Meyer Bahlburg, New ha escrito una serie de artículos científicos que sugieren una fuerte conexión entre el CAH y el lesbianismo. Según ha escrito, el CAH también se asocia con un desinterés en la maternidad, así como el «comportamiento masculino» en las niñas.

La dexametasona, dex, para abreviar. Es un esteroide que New y algunos de sus colegas creen que pueden evitar algunos de los signos externos de la CAH en las niñas. Pero la dex nunca ha sido aprobada por la FDA para el tratamiento de CAH en el útero. New está recomendando su uso en base un un pequeño estudio realizado con sólo 26 participantes en Suecia.

Un colaborador de New desde hace mucho tiempo, Meyer-Bahlburg, decía esto en un artículo que publicó hace unos años:

«Las mujeres que padecen CAH tienen un interés más bajo en el matrimonio y la realización de la función del cuidado de niños y amas de casa tradicionales. Como los niños, muestran un interés inusualmente bajo en la participación materna en el juego con muñecas bebé.»

Según New, la dex no sólo puede curar el lesbianismo, sino que también animará a que deseen desempeñar los roles tradicionales de esposa y madre.

New anima los médicos a prescribir un medicamento que ni siquiera puede curar la CAH. Puede evitar los genitales ambiguos en las niñas, pero no ayuda a la condición subyacente. Muchas de las mujeres que recibieron tratamiento con dexametasona no se dan cuenta que la droga no cura la hiperplasia suprarrenal congénita, y se sorprenden al descubrir que no es aprobado por la FDA.

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